¿Es para ti el Cold Soaking?

Seguramente, si eres de ese tipo de persona que disfruta de ir a caminar y acampar a lugares donde no tienes a tu alrededor las comodidades que ofrece la civilización te has preguntado o puesto a pensar en que llevarás de comer para desayuno, comida y/o cena según sea el caso.

Si tu automóvil llega hasta el punto donde te instalaras entonces no hay mucho problema si el espacio te lo permite, ya que podrás cargar un tanque pequeño de gas, parrilla a gas o eléctrica y conectarla a un inversor de corriente conectado previamente a la batería de tu auto.

Si tu caso no es el anterior, seguramente no querrás llevar peso extra en tu mochila. Claro que existen sistemas portátiles que consisten en una tanque, muchas veces desechable de gas y un quemador pequeño donde podrás calentar agua o cocinar lo que llevas para comer.


Definitivamente este método no es para todos, pero es posible que no siempre tengas a la mano las herramientas antes mencionadas o el clima no permita una fogata donde puedas colocar una parrilla. En estos casos es muy útil conocer y utilizar el llamado “cold soaking”.

¿Qué  es el cold soaking?

El cold soaking (remojo frio en español) es el método que consiste en rehidratar alimentos con agua fría o no caliente. 

Como aprendimos en este artículo anterior. Para reconstituir un alimento deshidratado no es necesario agregar agua caliente. 

Un alimento deshidratado solo necesita agua para volver a su forma previa al proceso de deshidratación, ese es el principio del también conocido “Stoveless backpacking”.   

¿Qué necesitas?

Si te has decidido a dejar atrás tus instrumentos para calentar y cocinar a la hora de salir a acampar, debes de saber que no es más complicado que empacar un envase, tupper o frasco hermético en tu mochila; preferentemente que sea de plástico resistente, tus cubiertos reutilizables y agua. 

¿Quieres llevar también bebidas preparadas? No hay problema. Agrega a lo anterior un termo hermético de plástico resistente o aluminio/inoxidable (yo recomiendo uno insulado) y de preferencia que cuente con un emulsionador o agitador para ayudar a integrar el polvo en el agua. 

¿De qué tamaño tienen que ser? Eso depende mucho de cuánto comes tu pero una buena medida para el primero puede ser 20 o 24 oz (590 o 710 ml aproximadamente). Un buen tamaño para el termo puede ser 24 a 32 oz (710 o 940 ml aproximadamente). 

No olvides que los recipientes que lleves tienen que cerrar de forma hermética para prevenir derrames dentro de tu mochila. 

¿Qué puedo preparar con este método? 

Desayuno

Comencemos por el desayuno y qué mejor que una mezcla de cereal, fruta y nueces? 

Como base podemos usar avena cruda o instantánea; a esto podemos agregar al gusto nueces toreadas, almendras en hojuelas o troceada, chispas de cacao tostado, coco rallado crudo o tostado, pasas, pasas de arándanos, fruta deshidratada picada, chispas de chocolate, etc. a los ingredientes anteriores agregamos dependiendo de que sea de tu agrado leche en polvo o bebida en polvo de soya, coco, etc. Para terminar, agregamos agua, que cubra los ingredientes y agitamos bien para que la leche o bebida en polvo se disuelva en el agua; dejamos hidratar 5 minutos. Listo para desayunar.

¿Comida y Cena?

No voy a separar la comida de la cena porque podemos intercambiar las opciones de uno al otro, incluso puedes terminar el día con una mezcla similar a la del desayuno.

Se trata de llevar ingredientes que podamos almacenar sin control de temperatura así que para comer y cenar podemos llevar: sopas instantáneas a tu elección que puede ser ramen (la típica de vaso o plato) o las de sobre, arroces instantáneos, cuscús, puré de papa en polvo, podemos hacer trampa y llevar frijoles refritos en bolsa. A todo lo anterior podemos agregar vegetales deshidratados que no son muy comunes pero los puedes encontrar como hongos o tomates; carne seca machaca, hojuelas de bonito (es un pez de la familia de los túnidos), chips de tocino (sazonador de imitación tocino), queso rallado seco, etc. Agrega agua suficiente, agita hasta integrar si es necesario, tapa tu recipiente y deja hidratar de 30 a 60 minutos. 

Si lo amerita puedes guardar tu recipiente tapado en tu mochila en lo que realizas otra actividad y al finalizar puedes sentarte a descansar y disfrutar de tu comida.

Photo by Matt & Chris Pua on Unsplash

¿Y de tomar?

Photo by Isabela Kronemberger on Unsplash

Esta no es nada complicada. Empaca leche o sustituto vegetal en polvo; si el pronóstico augura un día soleado y caluroso no olvides llevar isotónicos en polvo; té helado o agua fresca en polvo. Si eres de los que no perdona el café hay 2 opciones que te puedo dar. La primera, consigue un café instantáneo de buena calidad, mézclalo con azúcar y a la hora de prepararlo agrega también leche o sustituto vegetal. La segunda, lleva en tu termo o en una botella hermética café de extracción en frío. .  

Comentarios finales

Como 4 últimas recomendaciones: 

  • Puedes comprar sazonadores preparados o preparar el tuyo. 
  • Lleva todo racionado en bolsas de cierre listo solo para agregar a tu frasco pero no dejes basura, estas bolsas las puedes volver a usar. 
  • Para lavar y tener listo tu recipiente para la siguiente comida solo hace falta que agregues un poco de agua, tapar y agitar hasta retirar todos los residuos y tomarla. 
  • No olvides tus cubiertos de acampada.

Si encuentras este artículo interesante ayúdanos a llegar a más personas. Comparte en tus redes sociales y no olvides suscribirte para que no te pierdas ninguno. 

¿Te gustan los temas de campismo? No te pierdas este artículo.

¿Fan de la historia bélica? pásate por aquí.

Leave a Comment

Your email address will not be published. Required fields are marked *

Traducir »